RAJOY HA ORDENADO SACRIFICAR A UNO DE SUS HIJOS

Dios, mandaba sacrificar a los hijos de sus leales súbditos para probarles su amor y respeto a Él como hizo con Abraham y su amado hijo Isacc. Joder con Dios, como se las gastaba...

Rajoy (Dios), ha mandado a Abraham (Camps) que sacrifique a su hijo bien amado Isaac (Ricardo Costa). Dios, Rajoy estaba sumamente cabreado porque Camps no le hacía ni puñetero caso sobre el caso de la correa que le estaba apretando el vientre hasta no dejarle respirar. Harto de que nadie le hiciera caso ni en la Tierra ni en el Cielo, alzó su voz por medio de sus ángeles/as y con un gran grito ordenó que para saciarle debía de haber un sacrificio de inmediato. ¿Ah!, que diferencia con aquel Abraham que le respetaba y con su hijo que dócil como un cordero se dejó llevar al altar para ser sacrificado. Aquí, el hijo, no se ha dejado y escapaba, correteaba y se burlaba de su padre, padre que tampoco estaba por darle el sacrificio a Dios y se atrincheraba en su Canaán particular rodeado de sus "estomagos agradecidos" que le alababan e inciensaban lo que podían con grandes alharacas y sonrisas de ser simplemente unos estúpidos esbirros. Unos mierdas sin personalidad, pero ganando mucha pasta con él. Finalmente, se impuso la potestad del Padre, y se realizó el sacrificio incruento y "por un rato".

No se bien si después Dios se apiadará del padre Abraham, o al final resulta que Costa es el cabritillo que finalmente mató Abraham para saciar al Todopoderoso. Entonces...¿ quién será la víctima de verdad?. Me da la impresión de que finalmente el propio Dios matará a Abraham porque éste ya no es grato a sus ojos y se ha enfrentado a su autoridad. Bueno ¿autori..qué?. En la Biblia Dios le hubiera mandado a Camps un rayo, o un fuego celestial.

El problema de Rajoy es que tiene un partido tan sumamente corrompido en tantos lugares, que se va a tener que comprar él mismo un Kaláshnikov y va a tener que sacrificar a mucha gente a demasiada, y aún así, no va a poder contentar a los dioses reales que son sus votantes.

El poder corrompe. A la izquierda, a la derecha, de frente, atrás arriba y abajo. A los comunistas, a los luteranos, a los católicos, a los celadores de hospital. Es una mierda.