POR FAVOR SR. LADRÓN: GOLPEEME UN POCO...
El pasado mes de Noviembre, me dirigía de Panamá a Cuba. Llamé a un taxista llamado Aldo con el cual había hecho algún trayecto de más de 10 USD. Me pareció honrado, amable y según él era muy católico con su esposa e hijita. Un santo.... En el trayecto al aeropuerto de Tocumen, estuvimos hablando como siempre de todos los temas de Panamá. Llegamos, sacó la maleta del maletero, pero con la plática dejé el portátil y la mochila en el asiento trasero sin darme cuenta. Nos despedimos, quedamos para la vuelta que le llamaría para que me recogiera y marchó. en ese instante me percaté del olvido. Llamada a su celular: "a la órden" y a los 3 minutos estaba de vuelta. Cogí la mochila y .... me percaté de que algo raro había. Además no estaban ya en el asiento trasero, sino en el asiento delantero. Abrí la mochila y vi que la cámara había desaparecido. 6 años conmigo. Una Canon S3IS que ha hecho decenas de miles de excelentes fotos. Le dije: Aldo, falta la cámara y él me dijo: "para mí esa bolsa es sagrada y sería incapaz de meter la mano ahí". A partir de ahí perdí la cámara después de muchas más vicisitudes como la denuncia en la policía panameña digna de una historieta a contar a parte.
El asunto es que mi denuncia la envié desde Panamá a la compañía de seguros del viaje. La respuesta no tardó en llegar: "el seguro no se hace cargo porque Ud. ha sido objeto de un hurto y no de un robo..." "Según el artículo 2 del párrafo, etc, etc...". Resumiendo: el valor de la cámara a mi costa, y el resto de accesorios. Total 400 €.
La moraleja que quiero comentar es que en estos casos es mejor mentir en la declaración a la policía, decir que ha habido violencia (amenaza con algún arma, golpes, asesinato, etc, etc). En este caso se considera como un robo. Pero si te quitan la cartera o algo sin violencia es un hurto. Negligencia por mi parte: si la hubo porque olvidé en el taxi las pertenencias, pero sabemos quien es el ladrón con nombre y móvil, aunque eso no es importante.
Por lo tanto si me pasa esto de nuevo: primero mentiré a la policía y si hace falta le diré a alguien que me pegue una hostia (suave) en la cara para dar fe de sangre y así se considerará robo que no hurto.
Me veo diciéndole al ladrón: "por favor no me deje así, deme una leche, o hazme un cortecito!!!, que es solo para el seguro!!!. Por favor...sr. ladrón!!!! no me sea más cabrón!!!! que el seguro Allianz es poco seguro..."!!!!!!...como todos por cierto.
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