HISTORIA DEL CUBA LIBRE DEL "CITY" EN BILBAO

Recuerdo con nostalgia, pues pasé allí muchas horas con buenas compañías como la de mi hoy mujer Begoña antes novia...) que en el bar llamado City se tomaban los mejores cubas-libres de la historia, incluida la historia sagrada. El bar ya no es lo mismo puesto que su propietario original el amigo Agustín murió.

Era famosa su "ginebra preparada": ginebra MG, jugo de limón, agua de seltz, azúcar y granadina en vaso corto con hielo. Muy buena. Excelente para las mujeres que no toman alcohol. Un día vi a alguien tomando algo parecido a Coca Cola pero tenía una espuma por encima. Pregunté al propietario y me dijo que era Cuba-libre de ron Myer´s. Este ron es jamaicano y es de una melosidad excelente. Es dulce y con grado. Pura caña de azúcar. Pedí uno y era extraordinario. Su composición era: Coca cola, ron Myer´s, hielo hasta el borde y una pequeña rodajita de limón (sin exprimir). Luego lo agitaba ligeramente con la cuchara que sacaba una espumilla arriba que era olorosa y estupenda. El "trago" era exquisito. Rotundo, oloroso, sabroso, dulzón, y fresco: muy fresco. Te bebías en verano 1 sólo por vicio, luego el de deleitarse. Lo importante para mí era el vaso: un cristal de alta calidad en forma tronco-cónica con el culo algo grueso, y tallado con filigranas finas.

La receta era esa. Fácil. El ron complicado de encontrar en Bilbao (se lo compraba a mi amigo Pablo del famoso bar Tito´s detrás de Hacienda en Bilbao. Pablo falleció repentinamente...). Sólo lo comercializaba Cinzano y era una "rara avis",

Con esa receta lo intenté en casa muchas veces, pero el sabor era completamente distinto. Por eso volví a ver muchas veces a mi amigo Agustín y a disfrutar de sus cuba libres de Myer´s y a fumar del tabaco que en bandejas de plata amablemente ofrecía a sus clientes: Winston y Ducados. Siempre elegante, correcto y muy profesional. Me contaba que cuando Batista salió de Cuba expulsado por Fidel Castro , él que regentaba un casino en La Habana, tuvo que salir con lo puesto y sólo pudo sacar un juego café de plata y de allí eran esan bandejitas.

Aunque conozcas la receta, influyen tantos factores en la realización de cosas sencillas que será imposible el sacarlo igual. Por eso, es absurdo no dar las recetas. Yo creo que en aquel caso el hielo, de máquina tan transparente, y aquel maravilloso vaso influían en el sabor, amén de aquel coqueto,pequeño y elegante bar con Agustín y su chaquetilla roja diciendo eso de: "si, si, si...", mientras movía la cabeza asintiendo a tu comanda ayudaba al sabor. Todo un señor Agustín. Te envío este recuerdo con cariño.